Quien no está en el día a día en una empresa de tecnología, imagina a cientos de programadores sentados uno al lado del otro enfocados en sus tareas, con sus auriculares al máximo y sin conversar unos con otro… Lejos de esto, los equipos de Desarrollo han ido evolucionando cada vez más, adaptando sus prácticas a metodologías que aseguren el continuo intercambio de ideas y potencien sus creaciones.

Desde hace tiempo ya, el desarrollo de software se ha transformado es la combinación de 2 cosas muy difíciles de controlar: las personas y el software propiamente dicho, por lo que a continuación listaremos 7 motivos, que en base a experiencias propias, son los causantes por lo que los proyectos suelen fallar.

7 motivos por los que los Proyectos de Software fallan

1. La obsesión por las funciones.

En general las empresas suelen fallar en las entregas de los proyectos porque se quieren agregar funciones fuera del alcance original dilatando las fechas de entrega.
A la hora de planificar un proyecto es importante tener claro que se quiere desarrollar, con que funciones y los plazos sino lo único que se va a lograr es no poder entregar un producto funcional y por ende no se tendrá clientes que lo consuman.

2. Todo es urgente.

Cuando en un proyecto todo se convierte en urgente, nada termina siéndolo. En las empresas donde el concepto de urgencia se generaliza solo vamos encontrar una mayor probabilidad de fracaso.

3. Inmensa inversión sin ganancias.

Muchos proyectos suelen tener una inversión muy grande para poder tener el producto final, pero esto suele llevar a un camino, el del fracaso. En este sentido es muy importante la planificación de forma tal de saber en qué momento se puede sacar parte del producto al mercado el cual puede empezar a dar ingresos para compensar la inversión.

4. Balance entre desarrollo y pruebas.

Hay empresas que no le dedican el suficiente esfuerzo en las pruebas lo que luego se transforma en un producto deficiente y aumenta la mala imagen del producto. Es muy importante poder encontrar un balance entre lo que se desarrolla, las pruebas unitarias y las pruebas de calidad de forma de sacar un producto de calidad y a la altura de los consumidores.

5. Ambiente de trabajo.

Hay empresas que no dan ningún beneficio a sus empleados y hay otra que les dan demasiado sin obtener así que los empleados se sientan parte de la empresa. La realidad que para que las personas se sientan a gusto en una empresa hay que motivarlas no solo desde lo material sino desde lo profesional, si se logra generar esa motivación en los empleados lo que va a lograrse es un verdadero equipo de trabajo que empuja para el mismo lado y sacando adelante cualquier proyecto.

6. Falta de equipo de ventas.

Un equipo de ventas o marketing es tan importante como el equipo de desarrollo. Sin este equipo o la inversión necesaria para publicitar al producto lo más probable que el esfuerzo puesto en el desarrollo no sirva de nada.

7. Precios confusos.

Los precios se tienen que explicar de forma clara en la primera reunión con el cliente. Si el cliente no puede explicar a su equipo de finanzas o sus directores lo explicado en la reunión lo más probable que esa venta se pierda.

Como bien menciono antes, estos puntos surgen de experiencias previas en proyectos o empresas donde sus proyectos de desarrollo fracasaron o estuvieron muy cerca del mismo si no se hubiera corregido el rumbo.

Desde Adviters tenemos un framework definido el cual nos ayuda a acompañar a nuestros clientes para que sus proyectos puedan salir al mercado de forma satisfactoria en los tiempos y costos establecidos al inicio del mismo. A través de este marco de trabajo, podemos garantizar el éxito del proyecto, empleando la experiencia y buenas prácticas a los diferentes tipos de proyectos o clientes pero siempre apuntando a un mismo objetivo, que el proyecto se termine cumpliendo con los tiempos y la calidad esperada.